Durante la segunda edición del Premio Nacional de Impresión 3D, se conoció una supergrúa creada por un experto en el tema: Francisco Javier Granado Gila. Él cuenta con 51 años trabajando, vendiendo, alquilando, reparando y montando grúas. Cabe mencionar, que el residente de Valladolid presentó una enorme maqueta de una pieza funcional a escala.
Con un amplio conocimiento sobre grúas torre de construcción, Javier Granado obtuvo la idea tras hacer una búsqueda en la red y observar modelos a escala de otras máquinas que fueron creadas con fabricación aditiva.
Con ayuda de usuarios de páginas que visitaba el actual campeón de la competición, pudo obtener el diseño para iniciar la impresión tridimensional de su proyecto.

Premio Nacional de Impresión 3D para una supergrúa funcional
Características de la supergrúa creada con impresión 3D
El creador de la impresionante maqueta, expresó que trabajar con impresión 3D le resulta una tarea realmente sencilla y fascinante. De hecho, le pareció más problemático armar su obra, que crearla. No es de extrañar, tratándose de un modelo a escala con las siguientes características:
- 900 piezas totales en su estructura.
- 3 metros de longitud.
- 5 metros de altura al extender la supergrúa .
- Totalmente funcional.
- Es capaz de alzar hasta 3 kg (la real puede levantar 750 toneladas).
- Posee 10 micromotores con reductor.
El modelo creado se trata de una escala de la grúa Liebherr 1750.
¿Qué fue necesario para su construcción?
Para empezar, el ganador del premio nacional utilizó una impresora tridimensional casera de categoría cartesiana. Se utilizó PLA (plástico de ácido poliláctico) como material de construcción. Asimismo, se utilizaron 2 carretes de 1 kg cada uno. En estos se usaron los colores blanco y amarillo.
De esta manera, Granado logró crear una pieza que más allá de ser idéntica a la real, es igualmente funcional. Las únicas diferencias son detalles que no pudieron ser pulidos por falta de tiempo y, sin embargo, son mínimos. Los micromotores incorporados, le brindan la suficiente fuerza sin necesidad de utilizar electrónica en su manejo.
Finalmente, gracias al uso de un par de interruptores, es posible realizar cada uno de los movimientos requeridos. El motivo por el que el peso máximo que puede levantar la pieza creada con impresión 3D sea de 3 kg, es debido a la fragilidad del plástico.